Después de pasar un breve tiempo en un hospital psiquiátrico, la reportera Camille Preaker debe regresar a su pequeña ciudad natal para cubrir los violentos asesinatos de dos niñas preadolescentes. Durante años, Camille apenas ha hablado con Adora Crellin, su madre neurótica e hipocondríaca, y con Amma, su hermanastra, una joven a la que apenas conoce. Instalada en su antiguo dormitorio en la mansión victoriana de su familia, Camille pronto se identifica con las jóvenes víctimas. Atrapada por sus propios demonios, debe desentrañar el enigma psicológico de su propio pasado si quiere conocer la historia y encontrar al culpable de los crímenes.